“A veces uno amanece con ganas de
extinguirse…Como si fuéramos
velitas sobre un pastel de alguien
inapetente. A veces nos arden
terriblemente los labios y los ojos y
nuestras narices se hinchan y somos
horribles y lloramos y queremos
extinguirnos.
Así es la vida, un
constante querer apagarse y
encenderse’”
– Julio Cortázar