Ha sido establecido científicamente que el abejorro no puede volar. Su cabeza es demasiado grande y sus alas demasiado pequeñas para sostener su cuerpo.
Según las leyes aerodinámicas, sencillamente no puede volar.
Pero nadie se lo ha dicho al abejorro.
Así es que vuela.
Paulina Readi Jofré.
Y un día, sin esperarlo...llega alguien a tu vida que repara el viejo columpio, lo pinta de colores, le asegura las cadenas y te ayuda...
Te empuja suavemente y te sostiene. Entonces...te atreves a levantar los pies del suelo y sientes que puedes volar otra vez...
La extraordinaria relación de Christian Moullec con sus pájaros es mostrada en este asombrosos video en donde él conduce un ultraliviano y los pájaros creen que él forma parte de su bandada. Y lo mejor, sus ocasionales pasajeros pueden tocar las aves en pleno vuelo.
Dicen que las aves de plumaje se juntan y estas ...