Quizás nos hace falta una persona que nos diga que nos vemos bien, que nos quite la pelusa de la ropa, que nos acaricie el pelo hasta dormirnos, que nos diga “te quiero” aunque no tenga razón, que nos mire por horas sin ninguna explicación, que nos abrigue con su calor, y que nos susurre al oído “ No sé que me hiciste, pero, no sabes cuanto te adoro”. Quizá necesitamos una persona que ame nuestras virtudes y que se encariñe con nuestros defectos. Quizás…
-Luis Rondon A.