- Me iré.
- No, no lo hagas.
- ¿Por qué? ¿Me amas acaso?
- Mucho.
- Alguien dijo: “Si amas a alguien dejalo ir”.
- Era solo un cobarde que no tuvo el valor para jugársela por
alguien, pues si amas, das vuelta el mundo para que funcione.
El único amor consecuente, fiel, comprensivo, que todo lo perdona, que nunca nos defrauda, y nos acompaña hasta la muerte es el amor propio"
— Oscar Wilde