En algún lugar tiene que haber una mujer con quien congenies. No creo que te resulte tan difícil encontrarla. Yo no pude convertirme en esa mujer y cometí una crueldad. Me arrepiento de ello. Pero es que entre nosotros siempre existió algo así como un botón mal abrochado. Creo que podrías ser feliz de una manera mucho más normal y corriente.
Estaremos encantados de escuchar lo que piensas